
Cómo disfrutar de una buena sesión de cine: luces, cámara y... móviles-celulares apagados
Teléfonos celulares-móviles en el cine: cómo evitar que estropeen el visionado de nuestra película
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Cómo los teléfonos celulares-móviles están cambiando la experiencia de ver una película en el cine
Un buen cinéfilo quiere disfrutar de la película en una gran pantalla, con un fantástico sonido y sin molestias. Si no fuera así, seguramente, se quedaría en su casa. Hoy en día hay televisiones y sistemas de sonido que poco tienen que envidiar al de muchos cines. Pero vamos a ver la experiencia en el cine.
Siempre ha habido espectadores molestos que hablan constantemente durante la proyección, que hacen ruido, etcétera. Pero desde la llegada de los teléfonos móviles, este tipo de espectadores molestos se ha multiplicado.
Son habituales las interrupciones constantes causadas por el uso insistente del teléfono celular-móvil. Ya no únicamente el sonido de algunas aplicaciones de mensajería o de otra índole, sino la propia luz que emite el teléfono. Eso de poner el teléfono en modo silencio o vibrador no sirve. Se molesta mucho al resto de los espectadores con la propia luz del teléfono.
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El culmen de este tipo de comportamientos es la persona que graba toda la película -seguramente para subirla a internet-. O peor aún, que retransmite la película -generalmente estrenos- para sus seguidores. ¡Un comentarista de cine a nuestro lado! Una pesadilla.
¿Qué están haciendo las salas de cine?
Prohibir el uso de los teléfonos móviles-celulares dentro de sala. O restringir su uso. El mayor problema está en que la mayoría de las salas ya no cuentan con un acomodador al que poder dirigirnos. Tenemos que buscar a un responsable de sala y al final, protestar supone perdernos buena parte de la película.
Hay cines que buscan nuevas fórmulas. Entre ellas, para tratar de erradicar o minimizar este problema, algunas salas reproducen un aviso antes de la proyección donde recuerdan a los espectadores que deben apagar sus teléfonos celulares-móviles. Incluso, se advierte del delito contra la propiedad intelectual de grabar la película.
¿Funcionan estos avisos? Sinceramente, poco. Algunos no le hacen demasiado caso. La mayoría de los espectadores optan por no complicarse la vida y meterse en discusiones con estas personas que incumplen sistemáticamente las normas. Casi todo el mundo mira para otro lado. Incluso, si pueden, se cambian de sitio.
En algunas salas, hay 'vigilantes' que apuntan con un puntero láser a la persona que está utilizando su teléfono móvil-celular. Es posible que sea una molestia añadida para el resto de espectadores, pero parece ser que funciona. Es algo así como señalar con el dedo a una persona. A nadie le gusta ser señalado.
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Como siempre, en casi todos estos casos es una cuestión de educación. Cuando no se respeta a los demás y los buenos modales brillan por su ausencia, los mensajes y avisos valen de poco. Pero, al menos, sirven de recordatorio para los más olvidadizos.
Resumiendo, en la época de nuestros padres, la frase más escuchada en un cine era: "haga el favor de guardar silencio", o "puede callarse, por favor". Ahora, casi todo tiene que ver con los teléfonos celulares-móviles. Y, con la falta de educación.
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