Ser cortés, expresiones naturales.
Se puede ser cortés sin ser falso e importuno; y galante, sin ser adulador.
Ser cortés, expresiones naturales.
Deben desterrarse del trato social las protestas exageradas, si no falsas, que ciertos entes se permiten a cada paso, tales son por ejemplo: "yo soy, señora, el más rendido servidor de Vd."; "me tendré por el hombre más bienhadado si merezco el alto honor de recibir vuestras órdenes".
Valgámonos de otras frases más naturales y genuinas, v.gr.-por ejemplo-: "sírvase Vd. reconocerme por su servidor"; o "disponga Vd. con franqueza en lo que me reconozca útil", etc. Se puede ser cortés sin ser falso e importuno; y galante, sin ser adulador.
Ni tampoco hemos de incurrir en el extremo contrario de usar palabras que denoten mando o superioridad cuando dirigimos la palabra a personas con quienes carecemos de positiva franqueza, diciendo: "haga Vd. esto"; "dígame Vd. tal cosa"; "venga Vd. mañana"; sino que las sustituiremos por estas otras: "¿Quiere Vd. hacerme el favor de tal cosa?"; "sírvase Vd. decirme tal otra"; "¿tendrá Vd. la bondad de venir mañana"; "dispense Vd. la libertad que me tomo de de incomodarle"; "si no le sirve a Vd. de molestia..."; "¿me haría Vd. el gusto de...", etc.
-
16378
Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Lo peor es que algunos niegan el saludo con fingida distracción, con la idea de que se les crea ocupados en muy altos pensamientos.
-
No hay obligación de saber que los tapices llamados de los Gobelinos fueron y son muy estimados; pero sí hay obligación de no confundir a los Gobelinos con el partido político de los Gibelinos...
-
Nuestros buenos abuelos que sabían vivir bien, apreciaban mucho el rincón del fuego.
-
Las presentaciones son una muestra de fina deferencia y de cortés atención, el que la dueña de una casa facilitase el conocimiento y relaciones entre las personas que por vez primera se encontraban ante ella
-
Qué es la urbanidad y otras preguntas generales relativas a la idea general de la urbanidad y la buena crianza.
-
Las mujeres debían guardar mayor decoro verbal que los hombres, a buen seguro porque ellas eran las depositarias por antonomasia del decoro en sí mismo
-
Andar por la calle, preferencia al subir o bajar una escalera y reglas a observarse al hacer una visita.
-
Como los jóvenes no conocen aun por experiencia cuantas son las pasiones que procuran conservar los errores, creen que todas las verdades pueden decirse en presencia de cualquiera.
-
Entre las diversiones deben preferirse a las demás las que nos ponen en movimiento, y nos hacen ejercitar las fuerzas.
-
Comentario de Julia Valera sobre la obra de Erasmo de Rotterdam "De la urbanidad en las maneras de los niños" -De civilitate morum puerilium-.
-
No hay que salir sin saludar y sin despedirse de los presentes.
-
Si a la locuacidad se une el egoísmo, esto es, si siempre hablamos de nosotros mismos, de nuestros gustos, de nuestras cosas, y de cuanto nos pertenece, es positivo que fastidiaremos de una manera insoportable a cuantos nos oigan.