
¿Es elegante llegar tarde? La puntualidad es muy importante en nuestra vida social (con vídeo)
Ser puntual es ser educado. Desmontando la leyenda urbana de que llegar tarde es elegante
protocolo.org
¿Llegar tarde es signo de elegancia o mala educación?
En nuestra sociedad marcada por la tecnología y la inmediatez, existe un intenso debate sobre el valor de la puntualidad en los actos sociales. Cuando recibimos una invitación que indica claramente "20:00 horas", muchos consideran casi una estrategia premeditada retrasar su llegada hasta las 21:00. Este comportamiento, tan normalizado, merece una reflexión desde la perspectiva del protocolo social.
La justificación que suele escucharse es predecible: "Nadie llega a la hora indicada en la invitación". Esta afirmación se ha convertido en una leyenda urbana que hace de la impuntualidad colectiva casi una norma no escrita. Pero la pregunta fundamental es: ¿realmente es un signo de distinción o elegancia llegar tarde a un compromiso social?
El protocolo tradicional es categórico en este aspecto: la puntualidad no es simplemente una recomendación, sino una manifestación de respeto hacia los anfitriones y los demás invitados. Representa el valor que otorgamos al tiempo ajeno y refleja nuestra consideración hacia quienes han planificado meticulosamente el evento y necesitan saber que sus invitados van a respetar el horario propuesto.
Lo que muchos perciben como un gesto de sofisticación. llegar deliberadamente tarde, contradice los principios fundamentales de la etiqueta social. Esta contradicción nos coloca en una posición paradójica: aspiramos a proyectar refinamiento mientras incurrimos en un comportamiento que, analizado objetivamente, denota descortesía y mala educación.
En el ámbito del protocolo social, la elegancia nunca está en transgredir las normas, sino en respetarlas y aceptarlas con naturalidad.
La próxima vez que recibamos una invitación, consideremos que ser puntuales no disminuye nuestro estatus social, lo eleva. Porque no hay nada más refinado y educado que demostrar respeto por el tiempo y los esfuerzos de los anfitriones y del resto de invitados que llegan a su hora.
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
¿Estamos olvidando el valor del "usted"? El lenguaje puede ser una forma de respetar las sensibilidades de la otra persona
-
Singapur ha optado por prohibir el chicle por los problemas de suciedad que generaban y la dificultad y coste para deshacerse de ellos
-
¿Estamos asistiendo a una evolución o a una revolución del código de vestimenta a través de las nuevas generaciones?
-
La tecnología nos conecta con personas lejanas, pero nos separa de las personas cercanas. El impacto de las pantallas, móviles y tableras, en nuestra vida diaria
-
El debate está abierto. ¿Se está empobreciendo la comunicación? ¿Se están dejando de usar muchas palabras?
-
Relaciones sin etiquetas. El amor cada vez más no entiende de géneros ni jerarquías sociales. Los sentimientos son libres y se deben expresar también con libertad
-
Las manos quietas. Procura evitar el contacto físico con desconocidos
-
¿Debe tener siempre la razón el cliente? Cómo ofrecer un buen servicio sin llegar a ser sumiso y tragar por todo
-
La importancia de escribir buenos asuntos cuando se envía un correo electrónico. Los mails con un asunto que va al grano
-
¿Estamos criando a una generación que no valora el respeto? La pérdida de los buenos modales en la educación infantil
-
Un apretón de manos se convirtió en un "arma" y "no te acerques mucho a mí", era la frase más repetida.
-
Novia a la izquierda y novio a la derecha. ¿Por qué se colocan de esta manera en la iglesia?