
Modales del joven en la mesa. I
Los jóvenes deben aprender a comportarse en la mesa, sobre todo cuando la comparten con personas adultas
foto base Pablo Merchán Montes - Unsplash
Buenos modales en la mesa: cómo hacer un buen servicio de mesa
Aquella urbanidad
En la mesa debe dirigirse la mayor atención en servir a las señoras antes que los hombres; entre aquellas corresponde la preferencia a las de mayor edad, y siempre es debida a las extrañas, si se come en la casa propia.
Cuando es un joven invitado a colocarse en paraje a propósito para hacer los honores de la mesa, debe admitir después de una cortés excusa, y presentarse con soltura y decoro a efectuarlo.
Llegado el momento de principiar la comida, ha de cuidar que un criado esté pronto a facilitarle los platos, cubiertos o trinchantes, según la necesidad.
Indicará a los convidados las clases de sopa que haya, sirviéndola con la preferencia de costumbre, según el gusto de cada uno.
Te puede interesar: Servicios de mesa. A la francesa, a la inglesa o a la rusa
Para servir el cocido, separará en plato distinto el jamón del tocino, chorizo o morcilla, y dividiéndolo en trozos proporcionados, hará pasar el plato colocando en él un tenedor limpio; lo propio se ejecuta con el ave, y como es regular que esté bien cocida, ha de partirse por las coyunturas en pequeñas porciones; la carne cuidará de despojarla de huesos, tendones o grasa, troceándola al través en pedazos pequeños; y la verdura se ofrece y sirve al gusto de cada uno.
Los platos de entrada, si son fritos, tal como buñuelos, croquetas o cosa semejante, se sirven con cuchara, y si son chuletas, muslos de ave, embuchados, pies, etcétera, deben dividirse convenientemente y pasar el plato.
Los guisados se sirven con cuchara, si su contenido es en porciones proporcionadas; pero si son, como es regular, en grandes trozos, se cortan estos en plato separado colocándolos simétricamente, se sirve y después se ofrece la salsa.
Las aves mayores se deben trinchar una por una, y para ello es conveniente elegir un cuchillo y trinchante a propósito, y trinchar en pie o sentado según lo exija l caso.
En general para las aves, tal como capón, polla, etcétera, se coloca la pieza de lado en un plato de tamaño conveniente; teniendo con la mano izquierda el trinchante, se sujeta fuertemente clavando la parte inferior del ala y la pechuga; con el cuchillo que empuña la mano derecha se busca la coyuntura superior de la misma ala, se corta, y teniendo fijo el cuchillo en aquella parte, se levanta con el trinchante el ala, llevando con ella toda la parte posible del pecho; cortase en dos partes y colócase en otro plato.
Te puede interesar: ¿Cómo se come...? Cómo tomar algunos tipos de comidas y alimentos
En seguida, fíjase el trinchante en la parte superior del muslo; con el cuchillo se busca la coyuntura de abajo arriba, y separándola, se divide también en dos, colocándolo con los otros pedazos; lo mismo se hace con el otro lado; después se corta la rabadilla sacándola entera; se acaba de separar la pechuga, y cortando en dos porciones por el espinazo lo que queda, se sirve según el apetito respectivo.
- Modales del joven en la mesa. I
- Modales del joven en la mesa. II
- Modales del joven en la mesa. III
-
17529
Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Al principio del siglo XVII los ingleses consideraban como una manía del viajero Tomás Coryate, el haber llevado de Italia a Inglaterra el tenedor que ellos reputaron por mueble inútil.
-
Jamás nos acerquemos tanto a la persona con quien hablamos, que llegue a percibir nuestro aliento. Es una falta de cortesía y una invasión de su espacio personal
-
La urbanidad y la civilidad para los jóvenes en unas simples cuestiones.
-
¡Cuántos hombres hay que no serían tan malos si sus padres hubieran tenido el mismo cuidado con ellos que tiene el vuestro con vosotros!
-
Tan pronto como supiera leer, la dejaría en libertad de leer todos los libros de la casa...
-
Los oficios se terminan siempre con la fórmula: "Dios guarde a usted muchos años".
-
Las oportunas explicaciones disipan aquellos sinsabores o malas inteligencias que entre vecinos suelen degenerar en discordias.
-
Reglas sencillas de cortesía, de buenos modales y de instrucción para las niñas.
-
Lo peor es que algunos niegan el saludo con fingida distracción, con la idea de que se les crea ocupados en muy altos pensamientos.
-
El hombre juicioso sigue la moda sin afectación, y procura que se advierta más bien en su modo de vestir un buen gusto, que lo que se llama última moda.
-
Una ciencia que enseña a complacer en el verdadero rol o lugar que nos toca es la civilidad
-
No hagas a otro lo que no quisieras que otro te hiciera a tí.