Todo por no bajar una simple escalera.
Anécdota sobre el capricho de un soberbio embajador que costó muchas vidas al pueblo.

Vicente Villamón
Una visita y una escalera.
Mr. Hofman, cita una anécdota sobre el ceremonial observado en las visitas diplomáticas, y los inconvenientes que hay en dispensarse de ellas.
Cuando el conde de Avaux fue nombrado plenipotenciario en el congreso de Munster para la paz de Westalia , iban tomando los negocios un buen giro, más una visita recibida de un modo indebido lo trastornó todo y prolongó la guerra por más de seis meses.
Habiendo ido Mr. Contarini , embajador de Venecia , a hacer su visita diplomática al conde de Avaux, solamente le acompañó el embajador de Francia hasta la escalera, sin que el conde bajase un solo escalón. El orgulloso veneciano se incomodó de tal modo por esta falta de miramiento, que tomó inmediatamente la posta y fue a dar la queja a su gobierno.
Venecia, aunque debilitada, conservaba aún toda su soberbia, y declaró que no volvería a enviar su embajador sino cuando se arreglasen los honores que le eran debidos. La Francia estaba cansada de guerra, y después de grandes negociaciones, durante las cuales morían bastantes hombres, y se incendiaban no pocas ciudades, mandó el Regente al conde de Avaux que satisfaciese plenamente la quisquillosa vanidad de Mr. Contarini.
Éste volvió triunfante y visitó al conde que le acompañó hasta el pavimento de la puerta cochera, permaneciendo allí hasta que el Veneciano subió en su coche y le saludó profundamente cuando volvió la esquina, y Mr. Contarini le volvió el saludo, porque todos estos movimientos se habían estipulado en el "ultimátum"de Venecia.
-
7042

Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
La teoría más aceptada o que cuenta con una mayor base argumental, es la que justifica esta forma de colocar los botones por 'comodidad'
-
Los expertos señalan que no se debe confundir el protocolo con la urbanidad y recuerdan que existe una gran diferencia entre una reunión de jefes de Estado y el hecho de hablar con propiedad
-
El uso del sombrero ha sido siempre un tema controvertido por el hecho de conocer dónde se debe permanecer cubierto o no, o delante de quién hay que permanecer descubierto
-
El presidente de los Estados Unidos, George W. Bush, se confundió en su conversación.
-
Los anfitriones que sirven poca cantidad de alimentos a sus invitados les dejan descontentos. Además, es poco educado y correcto ser tacaño
-
Los Reyes Magos son los grandes 'competidores' de Papá Nöel que trata de ganarles terreno cada año... cosa que no debemos dejar que acabe con una de nuestras tradiciones más queridas
-
Las anécdotas ilustran, frecuentemente, una enseñanza moral. ¿Quién no recuerda alguna de las que ha sido protagonista un personaje histórico?
-
Anécdota sobre la inauguración de la nueva cocina del restaurante Akelarre de Pedro Subijana
-
Anécdota sobre una cena en una país africano y la situación de los invitados
-
Además de saber estar y conocer las reglas de protocolo, muchas de las personas que ocupan cargos importantes deberían contar con un buen bagaje cultural
-
Anécdota sobre la soltería del Príncipe por la que se interesó Su Santidad Juan Pablo II
-
No se puede llevar hasta el extremo el cumplimiento de las reglas de etiqueta. Hay que ser educado pero con una buena dosis de sentido común










