Reglas que han de observarse en el juego.
En el juego está mal visto tanto una persona que no sabe ganar como otra que no sabe perder.

Reglas que han de observarse en el juego.
Estando entre otras personas, ¿debemos demostrar mucha afición al juego y a jugar por cantidades excesivas?
Delante de otras personas
deberemos abstenernos
de demostrar que abrigamos
mucha inclinación al juego,
así como de jugar
cantidades con exceso,
porque a todo jugador
se le mira con desprecio.
¿Quién puede proponer el juego en una tertulia, y qué tendrá presente al proponerlo?
El juego, en una tertulia
solo puede proponerlo
el dueño o el superior
con relación al respeto;
debiendo manifestar
que lo hace por pasatiempo,
sin instigar a los otros
para que jueguen dinero.
Si llega algún conocido mientras jugamos, ¿qué practicaremos por atención a él?
Si llega algún conocido
mientras que jugando estamos,
deberemos levantarnos
y ofrecerle nuestro puesto.
¿Demostraremos disgusto cuando perdamos, o contento cuando ganemos?
No debemos demostrar
disgusto cuando perdemos,
ni tampoco si ganamos,
demostraremos contento.
¿Usaremos de artimañas o fullerías en el juego?
No nos hemos de valer
de artimañas en el juego,
ni mirar nunca las cartas
de los otros compañeros;
que aquel que tal ejecuta
demuestra que es un fullero,
arguye mucha codicia,
y se causa gran desprecio.
Mientras jueguen los demás, ¿de qué nos abstendremos?
Mientras jueguen los demás
en los ratos de intermedio,
de cuanto pueda distraerles,
abstenernos deberemos.
¿Qué observaremos en las dudas que se presenten?
Si se ofrece alguna duda,
no indicaremos empeño
en soltarla, o pretender
que valga el parecer nuestro.
¿Podemos dejar de jugar cuando nos parezca?
Por último, si a los otros
vemos que complace el juego,
deberemos continuar
jugando alegres como ellos;
y hasta tanto que nos hayan
manifestado deseo
de que el juego se concluya,
concluirlo no propondremos.
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
El saludo a una persona es una muestra de cortesía y buena educación.
-
Hay ciertas cosas que nos disgustan por lo que toca a los demás, y otras que nos incomodan con relación a nosotros mismos.
-
Aunque el hombre debe ser bondadoso, es menester que no degenere en imprudente, acordándose de que la bondad inclina a juzgar a los hombres.
-
Pensamientos y sentencias breves de carácter doctrinal que se proponen sobre los buenos modales y la urbanidad.
-
No dependen las perfecciones de un solo agrado: tantos son los gustos como los rostros, y tan varios.
-
La urbanidad puede abarcar muchas parcelas de nuestra vida. Aquí dejamos alguna de las preguntas relativas a las niñas y la urbanidad
-
Las niñas se hacen muchas preguntas sobre qué temas tienen relación con la urbanidad
-
Se debe particularmente cuidar de tener siempre los vestidos muy limpios: la modestia y la urbanidad no pueden soportar nada de suciedad ni de negligencia
-
La urbanidad encierra una misión mucho más dulce y más suave que la de dar elegancia a nuestras maneras e iniciarnos en las prácticas escogidas de una sociedad de buen tono.
-
El respeto, es la característica principal, entre muchas otras, que debe tener un niño con otras personas con las que convive a diario
-
De la urbanidad en las maneras de los niños.
-
Después del amor y la benevolencia, las más bellas cualidades con que podemos adornarnos son la modestia y la tolerancia.


