El arte de trinchar. Pavo, gallina, capón, pollo, ganso, pato, cerceta y pichones.
Del arte de trinchar, y del servicio de la mesa. Disección de las aves.

Del arte de trinchar, y del servicio de la mesa.
Disección de las aves.
Pavo.
Se trincha de dos modos: el primero consiste en levantar un alón y un anca del mismo lado, y luego el alón y anca opuestos; se ponen las ancas aparte después de haberlas dividido en dos trozos, y los alones se cortan y se hacen tajadas.
Hecho esto se levantan las pechugas, se divide el caparazón, y se parte en dos la rabadilla.
El segundo modo consiste en no trinchar todo el pavo. Por lo tanto, se levantarán las ancas con el caparazón, y después de haberlas desprendido, se da una cuchillada en el cuerpo por debajo de la rabadilla. Acto continuo, se levanta ésta, y se forma con ella lo que se llama una mitra, procediéndose luego a trinchar la parte delantera.
Para desprender bien las ancas y los alones es preciso tener mucho cuidado en buscar con el cuchillo las articulaciones.
Gallina, capón y pollo.
Para trinchar estas tres piezas se procede absolutamente del mismo modo.
Se levantan una después de otra las partes principales, y después las pechugas. Hecho esto se separa el caparazón y se corta horizontalmente.
Se divide cada anca en dos pedazos, cada alón en tres, y el caparazón en cuatro. Se ejecutan estas operaciones prendiendo el ave y asegurándola con el tenedor, e introduciendo luego el cuchillo por las articulaciones. Cuando la parte pulposa ha quedado ya descubierta y desembarazada, se van cortando longitudinalmente en rebanadas delgadas.
Ganso y pato.
El ganso se trincha por hebras o tiras, desde la parte superior del estómago, cogiendo la carne de los alones y alargándose hasta la rabadilla; se quitan cuatro tajadas de cada lado, y si no bastan se quitan más de las ancas y partes carnosas, y luego se dividen los huesos por las articulaciones.
Lo mismo se observa con respecto al pato. En la polla de agua, las extremidades de los alones son las más delicadas.
La cerceta.
Si este ave se saca cocida, se procede a trincharla del mismo modo que la polla; si se presenta asada, se divide en hebras o tiras, las cuales se bañan en su mismo jugo o en el zumo de limón.
Pichones.
Si se presentan en salsa, deben servirse con la cuchara, y ofrecer a las señoras la parte que media entre ambas ancas, como la más exquisita y estimada.
Si los pichones son asados, se dividen en dos o cuatro partes.
Si se parten en dos, debe ser a lo largo, de modo que queden un alón y un anca a cada lado.
-
11127

Aviso Los artículos "históricos" se publican a modo de referencia
Pueden contener conceptos y comportamientos anacrónicos con respecto a la sociedad actual. Protocolo.org no comparte necesariamente este contenido, que se publica, únicamente, a título informativo
Su opinión es importante.
Participe y aporte su visión sobre este artículo, o ayude a otros usuarios con su conocimiento.
-
Perdidas las riquezas de la nobleza por las causas que diremos, fueron recogidas por personas inteligentes y activas, que sin pertenecer a la clase de comerciantes o fabricantes, supieron hacerlas valer.
-
Los niños deben aprender a respetar a los mayores cuando salen de paseo o van caminando por la calle
-
Las diversiones corpóreas que prevalecieron en los pasados siglos nos dan por resultado conquistas, agresiones, saqueos y supercherías proclamadas como acciones honoríficas.
-
La voluntad y los puntos básicos para el cuidado del alma.
-
En llegando a la escuela, hará cuenta, que entra en la casa de la persona más respetable, por consiguiente, tendrá el debido respeto a este lugar y al maestro.
-
El placer que resulta de una visita trae consigo la obligación de devolverla a las personas iguales.
-
Al entrar en una iglesia, si está el Santísimo expuesto, se debe hacer la genuflexión hincando las dos rodillas, inclinando la cabeza y santiguándose.
-
En un templo debemos mostrar un profundo respeto y recogimiento.
-
Todos los principios son informes, y queda después la imaginación de aquella deformidad: la memoria de haberlo visto imperfecto no lo deja lograr acabado.
-
El hombre de ánimo delicado se abre a todos los sentimientos que engrandecen la naturaleza humana, y quisiera cerrarlo a cuantos la degradan.
-
Es totalmente contrario a la cortesía pedir de beber el primero, a menos que sea uno el más importante de los comensales.
-
Las propiedades de los cosméticos naturales son muy adecuadas para el cuidado del cuerpo.
