IV Congreso Internacional de Protocolo.
El Congreso iba dirigido a cualquier persona sensibilizada en las cuestiones de protocolo y disciplinas auxiliares.
Palma de Mallorca, IV Congreso Internacional de Protocolo
IV Congreso Internacional de Protocolo.
Los pasados días 15, 16 y 17 de Noviembre (2002) tuvo lugar en Palma de Mallorca (Islas Baleares) el IV Congreso Internacional de Protocolo, organizado por la Escuela Internacional de Protocolo y por el Centre de Formació PIME.
El Congreso iba dirigido a cualquier persona sensibilizada en las cuestiones de protocolo y disciplinas auxiliares, y en especial para cualquier profesional del protocolo interesado en el reciclaje de sus conocimientos en la normativa y técnicas en el campo de la organización de actos, y para quienes desempeñan puestos de responsabilidad en gabinetes de dirección, comunicación, relaciones institucionales o externas, y secretarías de dirección.
Fue de interés este encuentro para quienes de una u otra forma están próximos al protocolo diplomático, institucional, empresarial, privado, turístico, deportivo, universitario, académico, cultural, religioso y judicial, así como para cuantos alumnos o estudiosos se preparan actualmente para ejercer el protocolo y sus disciplinas auxiliares en el futuro, y quienes se preparan para otras profesiones en cuyas tareas el protocolo incide de alguna manera, caso de estudiantes de periodismo, empresariales, políticas, sociología, derecho e historia.
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El IV Congreso Internacional de Protocolo en el que ya han participado más de dos mil personas, en sus citas de Oviedo (1995), Sevilla (1997) y Valencia (2000), cerrará en las Islas Baleares un primer ciclo: el de garantizar un foro permanente de encuentro de los "protocolos" de todo el mundo. A partir del 2002, bajo el empuje y dirección de la Organización Internacional de Protocolo, el Congreso buscará ser el referente mundial en este campo y motor de modernización de una profesión que desde hace algunos años busca ponerse al día para contribuir, desde su visión de servicio público, a la mejora de la Sociedad.
La cita balear constituirá una obligada ocasión para que de nuevo todos nos sentemos a reflexionar sobre aquellas cuestiones que nos preocupan o inquietan en nuestro quehacer diario, en la regularización de nuestra profesión y en el acceso a la misma. Siempre hemos sido reticentes los profesionales del Protocolo a sentarnos entorno a una mesa para hablar a corazón desnudo de nuestras inquietudes. "Más de lo mismo", "¿qué me puede enseñar a mí el Congreso?", "¡eso es para neófitos!". Expresiones que ilustran el desconocimiento de cómo se logra que la profesión sea fuerte y respetada, no se aleje de la realidad y siga prestando su vocación de servicio.
La Pluralidad del Comité Organizador, donde convive una pequeña representación de todos los protocolos mundiales, es el mejor exponente del deseo de sus organizadores de que en este Congreso tenga cabida todo aquél que tenga algo que decir o innovar, algo que proponer o trasladar. Porque el Congreso no es un curso más, o un seminario de menos o más nivel.
Es un foro donde todos sin excepción podemos expresar nuestras preocupaciones o sugerencias, podemos escuchar las experiencias de otros y donde podemos extraer nuestras propias conclusiones. No es misión del Congreso enseñar. Su vocación es reunir y desde la reunión posibilitar la puesta en escena de experiencias y pensamientos que conciten el interés y el debate. El resultado final dependerá del aprovechamiento que cada uno quiera sacar. Ahí reside la clave de este Congreso.
Noviembre, pues, mes de encuentro. El Presidente del Govern de les Illes Balears y los empresarios de las islas ya nos invitaban en la clausura del encuentro de Valencia a esta nueva cita. Ellos son nuestros principales anfitriones, que se están volcando en los preparativos del que realmente puede ser el mejor Congreso. A través del Centre de Formació de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (PIMEM), Secretaría Técnica de este encuentro, y bajo la dirección del Comité Organizador, se trabaja ya intensamente para que este IV Congreso Internacional de Protocolo constituya el obligado punto de referencia en el mundo y en este campo nuestro. Y se trabaja con la puerta abierta, para que el que tenga algo que proponer para un mejor desarrollo de las sesiones pase sin más. El compromiso de "todos" tiene su sitio en Palma de Mallorca.
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